Desde su extradición a Estados Unidos, el 13 de mayo de 2008, fue su primera audiencia de versión libre ante un Fiscal de Justicia y Paz transmitida vía satélite desde la Metropolitan Correctional Center de la ciudad de Nueva York, y vista por decenas de sobrevivientes de las víctimas en una sala acondicionada en el edificio de la justicia en Medellín.
Con relación a la ‘Operación Orión’ que lanzó el estado entre 16 y 19 de octubre de 2002 en la Comuna 13 de Medellín aseguró que “reitero la participación de miembros de la fuerza pública, en el caso particular de los generales Montoya y Gallego” y explicó que ese operativo oficial lo había coordinado con ambos oficiales, con varios meses de anticipación a través de uno de sus hombres, Elkin Loaiza, quien, según aseguró, actuaba bajo su orientación.
‘Don Berna’ contó que semanas antes de la ejecución de la ‘Operación Orión’, hombres del Bloque Cacique Nutibara (BCB) habían hecho inteligencia en distintos barrios de esa comuna, lo que les permitió tener la ubicación precisa de quienes ellos habían señalado como guerrilleros de las Farc, el Eln y los Comandos Armados del Pueblo (Cap) que actuaban allí. “Varios de mis hombres entraron con la fuerza pública encapuchados porque muchos de los que allí vivían los conocían”, dijo.
Para la época de la ‘Operación Orión’, el general Mario Montoya se desempeñaba como comandante de la IV Brigada del Ejército, con sede en Medellín, y el general Leonardo Gallego era el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
Esta confesión, pero sin juramentar, ya la había hecho este jefe paramilitar el 25 de febrero de este año ante la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York, durante su juicio por delitos de narcotráfico, donde fue condenado a 31 años de prisión. Escribió entonces entonces al juez Richard M. Berman: “Las fuerzas de autodefensa del BCN (Bloque Cacique Nutibara) llegaron a la Comuna 13 como parte de la alianza con la Cuarta Brigada del Ejército, incluyendo a los generales Mario Montoya, del Ejército, y Leonardo Gallego, de la Policía”. (ver aparte de la declaración de 'Don Berna' en Estados Unidos)
En esa declaración agregó que al BCN le fue asignada una unidad antisecuestro del Gaula para que “asistiera a sus hombres en los esfuerzos conjuntos durante la ‘Operación Orión’”, y narró que la coordinación con los militares y los policías para desalojar de la zona a las milicias de las Farc, el Eln y los Comandos Armados del Pueblo estaba bajo la responsabilidad de un hombre conocido con el alias de ‘King Kong’.
Así mismo, ‘Don Berna’ acusó a miembros de las fuerzas armadas de estar involucrados en la masacre de ocho personas que realizaron paramilitares de ‘Bloque Héroes de Tolová’ (BHT) en la Comunidad de Paz de San José de Apartadó. Dijo que hubo complicidad con tropas del Batallón Vélez, adscrito a la XVII Brigada del Ejército, con sede en el municipio de Carepa, Urabá antioqueño. Aseveró que el mayor José Fernando Castaño, quien, según él, ordenó la muerte de los niños.
Murillo Bejarano narró que el mayor Castaño le había dado la orden a los paramilitares de que mataran “a los niños porque según él cuando crecieran serían guerrilleros”. En esa masacre fueron asesinados los menores Santiago Tuberquia Muñoz de 2 años y su hermana Natalia Andrea de 6 años; Deiner Andrés Guerra Tuberquia de 11 años; y Beyanira Areiza Guzmán de 17 años. Junto a ellos perecieron Luis Eduardo Guerra, Sandra Milena Muñoz, Alfonso Bolívar y Alejandro Pérez. Todos habían sido descuartizados.
El Fiscal de Justicia y Paz le preguntó si tenía evidencias que dieran soporte a sus graves acusaciones. ‘Don Berna’ no dio pruebas, y dijo que siempre hubo coordinación con miembros de las fuerzas armadas. “En las zonas de influencia nuestra siempre se coordinó cualquier operativo con ellas, siempre hubo un apoyo y una colaboración mutua, y en este caso no es ninguna excepción”.
Se suspende audiencia
‘Don Berna’ además dijo que dado el riesgo que corre su familia en Colombia no hablará de los casos de gran connotación política, militar y económica ante Justicia y Paz. Además, llamó la atención a este respecto, pues no sólo era una circunstancia que afrontaban su familia sino la de varios jefes paramilitares extraditados a Estados Unidos en mayo del año pasado.
Al iniciar la tarde, la abogada defensora del jefe paramilitar pidió la palabra para anunciar que las dos sesiones de versión libre programadas para este miércoles y jueves deberían ser reprogramadas porque su cliente presentaba quebrantos de salud.
“Como es de público conocimiento y es de notoriedad, el señor Murillo Bejarano tiene algunos problemas físicos que causan un cansancio agravado en comparación a las demás personas; además, ha presentado problemas de tensión en los últimos días, lo que genera un agotamiento en la disponibilidad que tiene para actuar en estas diligencias de versión con toda la capacidad que requiere y la atención que requiere una diligencia de éstas”, declaró la defensora.
De inmediato, el Procurador presente en la sala de víctimas de la ciudad de Medellín reclamó pruebas del estado de salud de Murillo, toda vez que no es la primera ocasión que se excusa de las audiencias para no continuar en ellas.
“La Procuraduría considera que es necesario que haya algún crédito, alguna prueba que la defensa haya presentado acerca del estado de salud del versionado, para efectos de que se llegue a una solución de la petición que ha presentado”, sostuvo el funcionario.
El Procurador recordó que en la primera versión que se hizo en Medellín, en julio de 2007, se le habían fijado diligencias para cuatro días, pero al segundo día la defensa igualmente solicitó la suspensión por razones de salud, “la cual dio lugar a una suspensión por el término de tres meses y ello por supuesto constituye una defraudación de los intereses de las víctimas y un descrédito para todo el proceso de Justicia y Paz”, dijo.
‘Don Berna’ respondió que la Fiscalía tiene en sus archivos documentos sobre su condición física, la cual volvió a describir en esta ocasión: “tengo huellas indelebles de los atentados que he recibido, perdí la pierna derecha, tengo una prótesis, tengo todavía impactos de armas de fuego en mi espalda, tengo un proyectil a tres milímetros de la columna”.
Señaló que antes de su extradición a Estados Unidos estaba bajo tratamiento médico y luego dijo: “Sepa señor Procurador que el servicio médico aquí es muy regular, y no he tenido acceso a los servicios médicos adecuados”.
Por último resaltó el gran esfuerzo para asistir a esta primera audiencia de versión libre, pues allá no tiene ni los mecanismos, los elementos, ni acceso a la información con la cual podría contribuir a aminorar el dolor de los sobrevivientes de su accionar paramilitar.
“Hay muchas víctimas que están presentes en la salas en Colombia que saben de mi esfuerzo, que saben de mi consideración con ellas, que saben de mi contribución a aclarar muchos hechos, gracias a esto se ha logrado de una u otra forma aminorar ese dolor, no es negligencia, no es que me esté negando, pero usted sabe, señor Procurador, que con nuestra extradición se coartó la verdad”, reiteró.
Ante la propuesta del Fiscal de suspender la audiencia de este miércoles y realizar la programada para el jueves, ‘Berna’ insistió en que no podía por razones de salud. Las audiencias entonces fueron suspendidas y no se fijó fecha para una siguiente cesión.