Kabul, 7 oct (EFE).- Unos 250.000 afganos han vuelto a su país en lo que va de año, procedentes de Pakistán e Irán, la mayoría obligados a la mala "situación económica y de seguridad" que sufren en el exilio, informó hoy la agencia de la ONU para los refugiados.
El Alto Comisariado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha asistido desde enero de 2008 a 251.880 afganos, de los que 248.951 entraron en el país procedentes de Pakistán.
La mayoría de quienes retornan se ha asentado en las zonas del este afgano (un 63 por ciento), mientras que un 13 por ciento vive ahora en Kabul.
Entre ellos, hay además unas 30.000 personas que viven en cinco campamentos situados en las regiones de Nangarhar y Laghman (este), después de verse obligados a regresar por el cierre del asentamiento de refugiados de Jalozai, en el noroeste de Pakistán.
Pakistán, que está llevando a cabo una violenta ofensiva militar en las zonas del noroeste para acabar con los insurgentes, ha presionado en los últimos días a los refugiados afganos en su suelo para que abandonen el país.
En Pakistán viven unos 1,8 millones de refugiados afganos, según dijo a Efe el portavoz de la ACNUR en el país, Babar Baloch.
Desde la caída de los talibanes, a Afganistán han retornado unos cinco millones de refugiados, de los cuales muchos carecen de tierras, empleo o vivienda, y sufren escasez de agua y servicios básicos como la sanidad o la educación.
El país ha registrado un repunte de la insurgencia en los últimos dos años: en lo que va de 2008, más de 4.000 personas han muerto víctimas de la violencia, entre ellos más de 1.500 civiles.
El Alto Comisariado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha asistido desde enero de 2008 a 251.880 afganos, de los que 248.951 entraron en el país procedentes de Pakistán.
La mayoría de quienes retornan se ha asentado en las zonas del este afgano (un 63 por ciento), mientras que un 13 por ciento vive ahora en Kabul.
Entre ellos, hay además unas 30.000 personas que viven en cinco campamentos situados en las regiones de Nangarhar y Laghman (este), después de verse obligados a regresar por el cierre del asentamiento de refugiados de Jalozai, en el noroeste de Pakistán.
Pakistán, que está llevando a cabo una violenta ofensiva militar en las zonas del noroeste para acabar con los insurgentes, ha presionado en los últimos días a los refugiados afganos en su suelo para que abandonen el país.
En Pakistán viven unos 1,8 millones de refugiados afganos, según dijo a Efe el portavoz de la ACNUR en el país, Babar Baloch.
Desde la caída de los talibanes, a Afganistán han retornado unos cinco millones de refugiados, de los cuales muchos carecen de tierras, empleo o vivienda, y sufren escasez de agua y servicios básicos como la sanidad o la educación.
El país ha registrado un repunte de la insurgencia en los últimos dos años: en lo que va de 2008, más de 4.000 personas han muerto víctimas de la violencia, entre ellos más de 1.500 civiles.
0 comentarios :
Publicar un comentario